domingo, 4 de octubre de 2009

Definitivamente no puedo afirmar que la pasar las horas los pensamientos desaparecen o simplemente quedan al olvido... Pero acaso uno puedo perdonar si realmente no logra olvidar es paradójico y superficialmente irreal tratar de ahondar en la connotación de recato y sumisión sentimental. ¿Desde cuando tratar de seguir adelante conlleva a retroceder más que avanzar? A lo mejor dar zancadas de nostalgia hacen que el camino de lágrimas se evapore con perseverancia y constancia, sobre todo con autofortaleza...aquella que alguna vez fue brindada por grandes dioses griegos a mortales para refugiarme interiormente y sacar fuerzas para alcanzar el exito. Pienso y luego existo así tengo chance de poder encontrarme sobre todo para alentarme y así encaminar mis sentidos mi mirada hacia un objetivo: creer en mi.

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